La historia tiene una mano larga que siempre te alcanza o nos alcanza como nación o como humanidad entera. Teológicamente nosotros somos una humanidad caída por el defecto del pecado y tal.
Primer plano:
¿Por qué los gringos son tan metiches?
Dentro de los Estados Unidos hay una lucha muy de ellos, que sugiere que hay un grupo, grande por cierto, que quiere el aislacionismo y otros que desean estar ahí jodiendo por el mundo picando y huyendo. Según René de Chambrun yerno de Pierre Laval alias El Indefendible, otra historia, porque el pobre René tuvo que ser abogado defensor de un tipo odiado por todos.
Según René de Chambrun;
Roosevelt y la plana mayor del gobierno no querían entrar en la segunda guerra y pensaban apoyar de pasadita, como quién no quiere. Tenía dentro Roosevel, un grupo de muchachones que buscaba para los Estados Unidos la autarquía y hoy todavía hay muchos que piensan lo mismo. Ni que fuera así de simple.
El ataque a Pearl Harbor los saco de su espacio cómodo y convirtieron su industria de paz en una industria de guerra. La industria de guerra no volvió a ser una industria de paz y como diría el almirante japonés Yamamoto; “Hemos despertado a un gigante dormido”, lo demás es historia y ¿para que ahondar más?
Cuando Eisenhower entregó a Kennedy, el general de la segunda guerra y presidente saliente de los EEUU, advirtió que esa industria de guerra le iba a traer consecuencias al mundo y a los mismos americanos del norte.
No se equivocó el viejo.
Pero la industria de paz de los americanos no vuelve más a menos que ellos quieran bajar su nivel de ingresos.
¿Habrá patriotismo para hacer soberana empresa?
Veremos, mejor no deslenguarse.
Viene un segundo plano...A ver.
Luis Eduardo Llanos Cabeza
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